Con tan escasa diferencia de edad,
siendo de la misma raices,
tu y yo somos en este viaje existencial
pasajera con destinos parecidos.
Tu fuiste en los epocas lejanas de
nuestra juventud tan debil e
indefensa como yo, sin embargo,
eras para mi como un cantilado bravio
que nunca se desgastabas y yo
Solo como un mar inquieto en el
que jugaban las olas, yendo a recostarme
siempre a mi costa que eras tu.
Fuiste para mi hermana y madre,
Como corola y flor, como raiz y tierra,
Como bosque y verdor.
¡Quien te iba a decir entoces!
Que la maternidad
no seria tu amiga en la adultex
porque en mi juventud
fuiste para mi una madre.