LA TORMENTA.

Te vi por primera ves 
y nublaste mi vida, llegaste 
como algo extraño, como un 
aguacero que se aproxima. 

Todo se mantenía en calma 
desde mi mente asta mi alma, 
pero no¡  
era normal ese viento  que 
que menaban las palmas.  

 Llegaste y de repente 
desprendiste en mi  relámpagos 
y truenos de sentimiento, y una 
calmada  lluvia atraída por ese viento.   


Como cambian los tiempos, 
de un hermoso cielo mira 
en que te convertiste, todos los días 
le pido a dios para que 
pueda arrepentirte.  

Pensé que que era sinceros
 tus sentimientos y que nunca 
te irías por esa puerta.  

De un gran amor 
te convertiste en una gran tormenta.