Poema de Francisco Villaespesa Ocaso.

 Asómate al balcón;Cesa en tus bromas, 
y la tristeza de la tarde siente. 
El sol, al expirar en occidente, 
de rojo tiñe las vecinas lomas. 
El jardín nos regala su aromas; 
mece el aire las hojas suavemente, 
y en la blanca espumas del torrente  
remojan su plumajes las palomas. 
Al ver con que tristeza en la llanura 
amortigua la luz su refulgencia, 
mi corazón se llena de amargura... 
¡ quizá el amor que en vuestro pechos  arde, 
apagarse veremos en la ausencia, 
como ese sol en brazos de la tarde¡