Han pasado muchos días,
ya cumplieron 20 años.
Ella colorcito claro,
el de colorcito asentado.
Ya no es chica traviesa,
ella es juiciosa y calmada.
El es inquieto, aplicado,
buen chico universitario.
Ella es despierta, alegre,
el divertido y hábil.
El, es un pimpollo que crece
ella, una espiga que se abre.